4/3/10

Guía de la FDA de manejo de alimentos en caso de catastrofes

La presente guía, es un documento preparado por la FDA (Food Drugs Administration de EEUU) para el manejo de agua y alimentos en caso de catastrofes, como preparse para esa eventualidad y que hacer.

Las emergencias pueden suceder. Y para enfrentarlas cuando surjan, la mejor estrategia es tener un plan previsto. Esto incluye saber cuáles son las precauciones adecuadas que se deben tomar para la protección y seguridad del agua y los alimentos ante amenaza de huracán, corte de energía eléctrica o inundaciones.

Esté preparado para enfrentar las emergencias

  1. Asegúrese de que su refrigerador y su congelador tengan termómetros para equipos electrodomésticos.
    • Compruebe que la temperatura del congelador esté en 0 °F o por debajo, y que la del refrigerador esté en 40 °F o por debajo.
    • En caso de un corte de energía eléctrica, los termómetros para equipos electrodomésticos indicarán la temperatura que hay en ese momento en el refrigerador y en el congelador para ayudarle a determinar si los alimentos están seguros.
  2. Congele agua en contenedores para ayudarle a mantener los alimentos fríos en el congelador, el refrigerador o las neveras en caso de que se vaya la electricidad. Si su suministro normal de agua está contaminado o no está disponible, el hielo que se vaya derritiendo también le proporcionará agua potable.
  3. Congele los productos refrigerados que posiblemente no vaya a necesitar de inmediato, tales como sobrantes, leche y carne y pollo frescos. Esto ayudará a mantenerlos a una temperatura que los proteja durante más tiempo.
  4. Agrupe los alimentos en el congelador. Esto ayudará a que los alimentos se conserven fríos por un período de tiempo mayor.
  5. Tenga neveras a mano para conservar fríos los alimentos refrigerados en caso de que vaya a faltar la electricidad por más de 4 horas.
  6. Compre o haga cubitos de hielo con anticipación y almacénelos en el congelador para usarlos en el refrigerador o en una nevera. Congele con anticipación los paquetes de gel refrigerante, para conservar el frío en las neveras.
  7. Por si acaso, tenga localizados cuáles son los lugares cercanos donde podría comprar hielo seco o bloques de hielo.
  8. Almacene alimentos en estantes que estén fuera del posible alcance de aguas contaminadas en caso de una inundación.
  9. Asegúrese de tener un suministro de agua embotellada almacenado en un lugar donde esté lo más protegido posible si ocurre una inundación.

Corte de energía eléctrica: Durante y después

Cuando se vaya la electricidad. . .

Los siguientes son algunos consejos básicos para proteger los alimentos:

  • Mantenga las puertas del refrigerador y del congelador cerradas todo lo más posible para que se conserve fría la temperatura.
    • - Si no se abre, el refrigerador conservará fríos los alimentos durante alrededor de 4 horas.
    • - Un congelador lleno mantendrá la temperatura durante aproximadamente 48 horas (24 horas si está medio lleno) si la puerta permanece cerrada.
    • - Compre hielo seco o bloques de hielo para mantener el refrigerador lo más frío posible si la electricidad va a faltar por un período de tiempo prolongado. Cincuenta libras de hielo seco deben mantener frío un congelador de 18 pies cúbicos, bien lleno, por dos días.
  • Si piensa comer carne, pollo, pescado o huevos refrigerados o congelados que aún se conservan a temperaturas seguras, es importante que cada producto se cocine muy bien y a la temperatura adecuada correspondiente para asegurarse de que se destruya cualquier posible bacteria de origen alimentario. Sin embargo, si en algún momento el alimento estuvo a una temperatura por encima de los 40 ºF por un período de 2 horas o más, deséchelo.
  • Lave las frutas y los vegetales con agua procedente de una fuente segura antes de comérselos.
  • Para los niños pequeños, trate de usar fórmulas para bebé preparadas y enlatadas, a las que no haya que agregarles agua. Cuando vaya a usar fórmulas concentradas o en polvo, prepárelas con agua embotellada si hay riesgo de que el suministro de agua local pudiera estar contaminado.

Cuando se restaure la electricidad. . .

  • Si mantuvo un termómetro para equipos electrodomésticos en su congelador, compruebe qué temperatura tiene cuando regrese la electricidad. Si la lectura del termómetro del congelador es de 40 °F o por debajo, los alimentos están en buenas condiciones y se pueden volver a congelar.
  • Si no mantuvo un termómetro en el congelador, revise cada paquete de alimentos para determinar si está en buenas condiciones. No puede confiarse por su aspecto o su olor. Si los alimentos todavía tienen pedacitos de hielo o están a una temperatura de 40 °F o por debajo, están en buenas condiciones para volverlos a congelar o para cocinarlos.
  • Los alimentos refrigerados deben mantenerse en buenas condiciones siempre que la electricidad no haya faltado por más de 4 horas y que la puerta del refrigerador haya permanecido cerrada. Deseche cualquier alimento perecedero (tales como carne, pollo, pescado, huevos o sobrantes) que haya permanecido a una temperatura por encima de los 40 °F durante dos horas o más.

Tenga en mente que los alimentos perecederos como la carne, el pollo, los mariscos, la leche y los huevos, que no se mantienen adecuadamente refrigerados o congelados, pueden causar enfermedades si se consumen, aunque se cocinen bien.

Cuando ocurre una inundación — Proteja el agua

Siga estos pasos para mantener el AGUA PROTEGIDA durante y después de una inundación:

  1. Si tiene disponible, use agua embotellada que no haya estado expuesta a las aguas de la inundación.
  2. Si no tiene agua embotellada, debe hervir el agua para hacerla potable. Al hervirse el agua se mueren la mayoría de los tipos de organismos causantes de enfermedades que pudieran estar presentes.
    • Si el agua está turbia, fíltrela pasándola a través de paños limpios o deje que se asiente y luego extraiga el agua transparente para hervirla.
    • Deje que el agua hierva durante un minuto, espere a que se enfríe y échela en recipientes limpios y con tapas.
  3. Si no puede hervir el agua, puede desinfectarla usando cloro doméstico. El cloro matará algunos tipos, aunque no todos, de organismos causantes de enfermedades que pudieran haber en el agua.
    • Si el agua está turbia, fíltrela pasándola a través de paños limpios o deje que se asiente y luego extraiga el agua transparente para desinfectarla.
    • Agregue 1/8 de cucharadita (u 8 gotas) de cloro líquido doméstico normal, sin aroma, por cada galón de agua. Revuelva bien el agua con el cloro y espere al menos 30 minutos antes de usarla.
    • Guarde el agua desinfectada en recipientes limpios y con tapas.
  4. Si tiene un pozo que se haya inundado, hay que hacerle pruebas al agua y desinfectarla después que las aguas de la inundación se retiren. Si sospecha que las aguas de su pozo podrían estar contaminadas, comuníquese con el departamento de salud local o estatal, o con su agente de extensión agrícola, para que le asesoren en su caso específico.

Cuando ocurre una inundación — Proteja los alimentos

Siga estos pasos para mantener los ALIMENTOS PROTEGIDOS durante y después de una inundación:

  1. No ingiera ningún alimento que podría haber estado en contacto con las aguas de la inundación.
  2. Deseche cualquier alimento que no esté en un contenedor impermeabilizado si hubo alguna posibilidad de que el mismo haya estado en contacto con las aguas de la inundación.
    • Entre los contenedores de alimentos que no son impermeables se incluyen aquellos con tapas de roscas, los que tienen tapas que se abren a presión, los de tapas que se halan y los de tapas plegadas.
    • Deseche también las cajas de cartón de jugos/leche/fórmulas para bebés y los alimentos que haya guardado en latas si han estado en contacto con las aguas de la inundación, porque no se pueden limpiar e higienizar bien.
  3. Inspeccione los alimentos enlatados y deseche cualquier alimento que esté en latas dañadas. Se sabe si una lata está dañada si tiene abultamiento, derrame, pinchazos, perforaciones, fracturas, oxidación profunda y extensa, o aplastamiento/abolladura lo suficientemente graves como para impedir que se apile normalmente o que se pueda abrir con un abridor de lata manual.
  4. Los alimentos preparados comercialmente en latas todas de metal y en envases flexibles que no estén dañados (como envases flexibles para jugos o mariscos que se pueden colocar con estabilidad en los estantes) se pueden salvar si se sigue el procedimiento a continuación:
    • Quítele la etiqueta, si es del tipo que se puede quitar, ya que la misma puede albergar impurezas y bacterias.
    • Cepille o limpie con un paño cualquier suciedad o sedimento que haya.
    • Limpie bien las latas o envases flexibles con agua y jabón, usando agua caliente si tiene. Enjuague las latas o envases flexibles con agua que sea potable, si tiene, ya que la suciedad o el residuo de jabón reduciría la efectividad de la higienización con cloro.
    • Higienice las latas o los envases flexibles de una de las dos siguientes maneras:
      • - Sumérjalos en agua y deje que el agua hierva durante 2 minutos, o
      • - Sumérjalos dentro de una solución acabada de preparar consistente en 1 cucharada de cloro líquido sin aroma por cada galón de agua potable (o el agua más limpia y transparente que tenga) y manténgalos sumergidos durante 15 minutos.
    • Deje que las latas o envases flexibles se sequen al aire durante 1 hora como mínimo antes de abrirlos o guardarlos.
    • Si pudo quitar las etiquetas, entonces identifique el contenido de las latas o los envases flexibles con un marcador, incluyendo la fecha de vencimiento (si la tiene).
    • Los alimentos en latas o envases flexibles reacondicionados se deben usar lo más pronto posible.
    • Cualquier fórmula concentrada para bebés, que se encuentre en contenedores todos de metal reacondicionados, se debe diluir en agua potable limpia.
  5. Lave bien con agua y jabón las cacerolas metálicas, la vajilla de cerámica y los utensilios de cocina (incluyendo los abridores de latas), usando agua caliente si tiene. Enjuáguelos y luego higienícelos dejándolos hervir en agua limpia o sumergiéndolos durante 15 minutos en una solución de 1 cucharada de cloro líquido sin aroma por cada galón de agua potable (o el agua más limpia y transparente que tenga).
  6. Lave bien la superficie de la cocina con agua y jabón, usando agua caliente si tiene. Enjuáguela y luego higienícela aplicándole una solución de 1 cucharada de cloro líquido sin aroma por cada galón de agua potable (o el agua más limpia y transparente que tenga). Espere a que se sequen al aire.

Todos pueden manipular la comida de manera segura si siguen estos cuatro pasos simples.

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