Un activista anti-caza de ballenas de Nueva Zelanda que se subió a un barco japonés en la Antártida, admitió la mayoría de los cargos en su contra en un tribunal de Tokio de hoy, pero negó haber herido a un marinero con ácido e insistió en que se justificaba en el corte de la red de un buque de pesca de ballenas .
Manifestantes frente a la Corte de Distrito de Tokio, con pancartas con mensajes obscenos, gritaron consignas pidiendo Peter Bethune a la horca, y acusaron a sus compañeros activistas de ser racistas y terroristas.
Sr. Bethune, de 44 años, enfrenta cargos de transgresión, la destrucción de la propiedad, la obstrucción de los negocios, asalto causando daño, y de violar la ley de control de armas de Japón después de subir al barco japonés, el Shonan Maru II, en febrero.
Si es declarado culpable, enfrenta hasta 15 años de cárcel por su trabajo de Sea Shepherd, una organización de estilo propio del medio ambiente "piratas" que se dedican a detener la caza anual de ballenas de Japón.
"Admito que me embarqué en el Shonan Maru II, pero creo que tenía buenas razones para hacerlo", dijo a través de un intérprete en la corte. "En relación con el cargo de asalto Niego la acusación. Para la interrupción de los negocios, admito que me disparó el ácido butírico, pero hubo circunstancias adicionales que vamos a discutir en los tribunales. el cuchillo era para cortar la red, reconozco el hecho. "
El juicio del Sr. Bethune es la primera vez que la agria polémica sobre la caza de ballenas japonesa ha salido al aire ante un tribunal penal. El hecho de que él aceptó la mayoría de los cargos y no utilizar el tribunal como una plataforma para elaborar la posición anti-caza de ballenas. Sea Shepherd sugiere la dificultad en la que el grupo ecologista se encuentra ahora.
Después de su arresto en febrero, Sea Shepherd describe el Sr. Bethune como un héroe y un "prisionero de guerra", pero en el período previo a su comparecencia ante el tribunal su retórica desafiante se ha convertido en silencio.
El grupo ha admitido que él espera que sea nada peor que un suplemento de la transgresión. Informes en los medios japoneses sugieren que el Sr. Bethune, un padre de dos hijos, tiene diferencias de opiniones con el capitán radical del grupo, Paul Watson, y está desesperado por volver a casa después de tres meses de detención.
El juicio es el resultado de lo que se ha convertido en un enfrentamiento anual en uno de los entornos marítimos más extrema en la tierra. Sea Shepherd ha despedido a rayos de luz, tirado bombas fétidas, y trató de enredar las hélices japonesa con cuerdas en un esfuerzo para evitar que la caza de ballenas. La parte japonesa ha contrarrestado con cañones de agua y cañones de sonido de alta tecnología.
Peter Bethune puede enfrentar una condena de hasta quince años.
Fuente: Times de Londres
Fuente: Times de Londres
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